viernes, 8 de junio de 2018

La tesis ¿sigue siendo una estrategia de formación?

El día de hoy fui consultado por un profesional tecnólogo de radiología para apoyarlo en la culminación de su tesis, la misma que sustentaría para optar por el grado de Magister en Gerencia en Salud, que está culminando en el postgrado de nuestra facultad.

El pedido no tendría nada de especial sino fuera por que el apoyo era específicamente para elaborar dos tablas que le faltaban para completar sus resultados.

Pedí que me explicará en qué consistía su trabajo de tesis. Comparto en forma sucinta la información que me brindó el tesista.
  1. El análisis de los datos lo había realizado su asesor de tesis y el no sabía como realizalo, es decir, no podía elaborar las dos tablas con una distribución de frecuencia simple que necesitaba.
  2. Revisando, tenía datos para mostrar hallazgos complementarios importantes, es decir aparte de presentar las diferencias entre los niveles del desempeño laboral y expectativas profesionales de los tecnólogos médicos en radiología, podía desagregar los resultados para dos hospitales nacionales, pero su asesor le había indicado que no presente esos resultados, porque iban más allá de sus objetivos.
  3. La investigación había tenido un universo de 113 profesionales tecnólogos y solo 64 habían respondido su cuestionario. Su asesor le había informado que no había problema, porque con lo recolectado podía extender sus resultados.
  4. Uno de sus instrumentos de medición, cuenta con 8 ítems para medir las expectativas profesionales, cuyas escala de medición es ordinal y expresada en "mala, regular, buena y muy buena". El tesista no sabía si había una forma de integrar los valores de cada uno de los 8 ítems para obtener un resultado final sobre la expectativa profesional de los tecnólogos incluidos en el estudio. El asesor lo solucionó asignando valores de 0, 1, 2 y 3 a cada categoría, sumó los puntajes de los ocho valores de cada cuestionario, estableció rangos de puntaje y clasificó las expectativas globales con la misma escala de categorías. Es decir, el asesor arbitrariamente estableció que los 8 componentes de la escala tenían la misma ponderación.  El tesista no podía determinar si lo realizado era válido.
  5. Le consulté sobre el porqué no elaboraba el mismo las tablas, manifestó que no sabía cómo hacerlo.
  6. Le manifesté que para poder ayudarlo mejor, tenía que leer o saber más sobre su proyecto de tesis y/o el desarrollo de la misma, a lo que manifestó que tan solo quería esas dos tablas para terminar la tesis y sustentar.
Al final le indiqué que no le podía ayudar por lo simple del pedido, aunque en el fondo mi respuesta y posición está relacionada con el contexto del pedido. El tesista no tiene una formación adecuada para realizar una investigación con conocimiento de causa, como se diría y debería ser. 

Decepcionado se retiró. Yo quedé con el sinsabor de la distorsión formadora que ha pasado este joven profesional en el postgrado y también con la clara percepción de que la tesis es sólo un trámite y no una estrategia de formación del profesional.

¿Tiempos modernos?

Dr. Adriel Olórtegui Yzú

jueves, 17 de mayo de 2018

No solo desfasados... tampoco preparados

No solo estamos desfasados, sino que además no tenemos las condiciones para facilitar el desarrollo de las tesis a los alumnos. 

Para empezar, sabemos que el desarrollo de investigación requiere de una aproximación multidisciplinaria; sin embargo, esto no se toma en cuenta durante el desarrollo de las tesis de los alumnos. La Facultad sólo asigna un asesor al alumno, que debiera ser una persona experta en el tema de investigación, pero se olvida de los aspectos metodológicos y de análisis de datos. 

Como mínimo se debiera ver que el alumno también tenga asesoría desde el punto de vista metodológico y estadístico, claro si queremos tener productos de valor. En el curso de seminario de tesis intentamos dar solución a esta problemática asignando profesores del departamento para que guíen el desarrollo metodológico de los alumnos (5 alumnos por docente) y esperando que los alumnos puedan encontrar un asesor adecuado para su tema de tesis. 

Asimismo, este año, gracias a la gestión de la Directora del DAMPySP se cuenta con la participación de una profesora de Estadística, a fin de resolver problemas que se puedan presentar en el desarrollo del proyecto de tesis. No obstante, estas son salidas sólo para el desarrollo del proyecto de tesis y que no tienen un sustento normativo en la Facultad, son iniciativas temporales. 

A mi entender se requiere de una aproximación más orgánica, con la emisión de normas que permitan que se reconozca el trabajo de los docentes que se vean involucrados en el desarrollo de la tesis y que incluya una participación de docentes de diferentes disciplinas y facultades.

Dr. Alvaro Whittembury Vlásica.

¡¿Estamos desfasados?!


Ayer, mientras esperaba a que llegarán otros residentes a la clase de Metodología de la Investigación, a los seis médicos residentes que estaban en el aula donde desarrollamos las clases les hice dos preguntas. La primera ¿dónde ha estudiado su pregrado? y la segunda ¿hizo tesis al terminar?.  Detallo las respuestas:
  • Ica, San Luis Gonzaga. Si hice tesis.
  • Huancayo, Universidad Nacional del Centro del Perú. Sí hice tesis.
  • Lima, UPC. Sí hice tesis.
  • Piura,  Universidad de Piura. Sí hice tesis.
  • Puno, Universidad del Altiplano. Si hice tesis.
  • Lima, San Marcos. No hice tesis.
Llegaron otros alumnos, pero ya no quise preguntar. 

lunes, 14 de mayo de 2018

Me apunto - Eduardo Zárate

Envío mis primeras ideas para el debate.
  • Para comenzar diremos que el problema de la universidad en general es endógeno en los niveles administrativo y docente, está en nosotros, por lo que ¿cómo generar alternativas en esta oscuridad casi permanente? es el primer debate o comentario que hay que estimular.
  • Como segundo punto está: ¿cómo mejoramos los espacios de enseñanza en lo inmediato para el 2do semestre?
  • Los profesores debemos tener un aula de docentes, pero en estos momentos de escasez de aulas, no "observa estas estas diferencias
  • Asimismo los directivos de la Oficina de distribución de aulas ¿lo saben? 
Primeras reflexiones del Dr. Eduardo Zárate.

domingo, 13 de mayo de 2018

Enseñar en la Precariedad II


Desde hace cuatro días que envíe el correo "Enseñar en la Precariedad", este ha sido visto en 433 ocasiones (según una aplicación de Gmail que permite hacer seguimiento de las vistas a los correos) y ha recibido 18 mensajes de respuesta, lo que me obliga a dejar mi anterior conducta de iniciar el debate y abandonarlo (bien acota Eduardo Zárate: "las batallas se pierden cuando  solo cuando se abandonan"), y proponerles a ustedes acciones más concretas. Este blog tiene esa finalidad.

Las respuestas brindadas dan una serie de aportes que deseo estructurar para motivar a la reflexión y propuesta. Desarrollo a continuación una primera aproximación que espero reciba un mayor desarrollo posterior de parte de ustedes, indicándoles que he tratado de agruparlas de acuerdo a las ideas principales que han sido publicadas.

PRIMERO: LA PRECARIEDAD ESTÁ INSTALADA


Resumen de los mensajes

Según lo manifestado en los mensajes, hay una percepción clara de que la precariedad existe y no es reciente. Aparentemente comenzó con la arremetida contra las universidades públicas y el auge de las privadas en la época del fujimorismo y ha continuado, sin que las gestiones hayan tenido una reacción adecuada. Esto se trasunta por cuanto hay cierto consenso de que la "precariedad" está normalizada y se acentúa por la ineficiencia y la gestión inadecuada.

Más aún, el error o deficiencia se ha mantenido y entonces el problema es sistémico y determina que no se tenga un enfoque definido de facultad (y/o universidad) puesto que nuestra Facultad no es generadora de investigación y tampoco está destacando por la enseñanza, como si lo hacía antes. Esto queda graficado con la pregunta de uno de los mensajes ¿En qué nos enfocamos entonces?

Ante esta situación las diferentes gestiones han tenido una respuesta "tradicional", sin haber buscado alternativas innovadoras y la estrechez de recursos ha pasado factura y generado la precariedad en la que nos encontramos.

Mi opinión

Coincido en lo expresado y la idea general.  Además, la precariedad no sólo está circunscrita a aspectos de ambientes o espacios, sino también a la gestión de procesos de la facultad. Por ejemplo, los procesos para presentar, revisar, sustentar y aprobar un proyecto de tesis y la sustentación de la misma, no están claramente definidos y daré un ejemplo. 

Visitando páginas web de facultades (no solo de medicina) de diversos países, uno puede encontrar la documentación sobre procesos de presentación, guías de estilo y hasta rúbricas de evaluación de la sustentación de tesis; en la web de nuestra facultad estos aspectos brillan por su ausencia. También recordemos que hace poco, nuestra Secretaria Académica se pasó toda una mañana indagando acerca de un plazo para presentación de los proyectos de tesis para los docentes que no tenemos grado, porque nadie sabía ni asumía una posición al respecto. 

Creo además que las diferentes gestiones no buscaron mecanismos, que dentro del mismo estado, nos permitan mantener y hasta ganar presencia. Falto innovación y creatividad, mencionó algunas ideas:

  • El acervo histórico y bibliográfico de la universidad debió ser puesto en valor. Solo hubo un proyecto de digitalización de una parte de las tesis e investigaciones antiguas, la misma que no ha trascendido, pues no la conocemos y no se continuó.
  • Si somos tradición y la primera Facultad de Medicina del país, significa que grandes maestros y médicos se han formado y han formado médicos y otros profesionales de la salud a lo largo de la historia de San Fernando. Sin embargo, aparte de Daniel A. Carrión, otros grandes nombres, como Hugo Pesce, Carlos Quiroz, Carlos Enrique Paz Soldán, Carlos Lanfranco La Hoz, Sergio Bernales, Fernando Cabieses, Pedro Ortiz y muchos más, no han sido puestos en valor; mediante el rescate y destaque su obra, su biografía, sus valores académicos. Tan solo desarrollar la Historia de la Facultad podría ser un proyecto de gran valor, el mismo que puede ser propuesta y ejecutado en alianza con entidades internacionales, ministerios (Salud, Cultura y Presidencia del Consejo de Ministros -CONCYTEC y Archivo General de la Nación). Desarrollar estos aspectos ayudarían a sustentar más propuestas, pues permitiría mostrar lo que San Fernando significa y tiene.
  • Un debate y posterior difusión por todos los medios posibles, sobre la universidad  pública peruana, su posición y su rol así como sus ventajas, debió ser propiciada, sobre todo en lo referente a la ventaja de las facultades de medicina privadas frente a las públicas.  En este punto, que una universidad pública sea desplazada de un hospital público por universidades que hacen uso del poder económico que tienen, hubiera sido (podría ser aún) uno de los importantes.

Estoy seguro que un debate interno y externo con otras facultades públicas, hubiera sido fructífero.

SEGUNDO: PROPUESTA DE SOLUCIONES


En las respuestas se han esbozado soluciones en el corto, mediano y largo plazo. Presento algunas a continuación.

Corto plazo

  • Reducir las clases teóricas; para lo cual se puede fortalecer el componente virtual.
  • Cursos con ensayos; esto reforzaría la reflexión, el aprendizaje y la redacción académica y profesional de nuestros estudiantes, la misma que en la actualidad, deja mucho que desear (por decir lo menos).
  • Desarrollar lecturas; esto cambiaría una "sesgada" modalidad de estudio que se ha hecho común, estudiar solo de las diapositivas que desarrolló el profesor.  En este caso considero que también debería prohibirse la entrega de las diapositivas a los estudiantes, por cuanto cada vez toman menos notas y así pierden un valioso medio de adquisición de información y conocimientos.

Mediano plazo

  • Desarrollar los componentes virtuales de la docencia; para lo cual deben desarrollarse unidades de producción multimedia (por lo menos en el Departamento).
  • Firmar o reactualizar convenios con los hospitales y establecimientos sanitarios.

Largo plazo

  • Obtener la cesión de alguna propiedad por la autoridad encargada de bienes incautados por el Estado: esto implica mucha gestión a alto nivel. Sin embargo, en caso se logre, permitiría tener un buen local para postgrado, para pregrado o toda la Facultad, lo cual nos permitiría crecimiento y el local de Grau puede usar para protocolos y como Sitio Histórico de la Medicina Peruana (leáse Museo o análogo).
  • Proyecto de Inversión pública: que tomaría, desde el proyecto a la construcción, un aproximado de 4 años.  El proyecto debe ser el máximo ambicioso y abarcar toda una nueva Facultad, pero en caso no sea posible, entonces priorizar pre o postgrado según corresponda.

Puede verse que hay ideas, muchas, y que seguro en el debate surgirán más, por lo que surgen algunas interrogantes. ¿Cómo se canalizan estas ideas? ¿Quiénes deben promoverlas? ¿A qué niveles deben plantearse? ¿Cuáles son los mecanismo y/o estrategias que asegurarían el éxito? ¿Tenemos una masa que pueda apoyarnos en términos de contactos, facilidades y orientación técnica y política adecuada y real? ¿Tendremos gestiones que más allá de sus diferencias puedan mantener una política de desarrollo como núcleo del progreso, avance y crecimiento de San Fernando?

Considero que nuestros aportes darán luces al respecto y espero que este espacio permita que todos nosotros, que reconocemos en San Fernando la posibilidad de crecimiento personal e institucional, colaboremos y podamos llevar propuestas.

Enseñar en la Precariedad

Expresar las incomodades y mortificación por lo que le sucede en forma reiterada, no es de ninguna manera agradable y mucho menos para los receptores del desagradable mensaje.

Lo que les voy a compartir, estoy seguro es compartido y percibido igual que yo, pero como son hechos repetitivos, que experimentamos semestre a semestre, finalmente terminan por dejar de sorprendemos, es decir, nos ocurre lo que un amigo psiquiatra me dijo, cuando algo se repite sin mayores cambios: «Nos habituamos a ello y perdemos la capacidad de sorprendernos y reaccionar».

El día de hoy no me fue posible realizar mi clase práctica de Epidemiología. El aula "prestada" por el CEM estaba ocupada porque se estaba realizando un examen general de la Academia del CEM.  Mis alumnos llegaron y la propuesta de subsanación consistió en juntar dos prácticas para el próximo día jueves. Frente a un problema, la solución siempre es un alivio; sin embargo, me quedó un sinsabor por la pasividad con que todo esto ocurre.

Continúo con el relato.

El aula que tenía asignada, está en el tercer piso y al desplazarme por los otros pisos para retirarme, observé que todas las aulas estaban siendo utilizadas para dicho examen general, consecuentemente, las clases de otros grupos de práctica del curso de epidemiología, tampoco iban a desarrollarse.

Continuando con mi trayecto, en el primer piso me encontré con el Dr. Pereyra, quien desarrolla su clase práctica en el aula de cómputo del CEM, esperando para "ver" si abrían la puerta de esa aula, pues estaba cerrada y no había llave. Los encargados habían ido a la ciudad por algún evento.

Luego de despedirme de Héctor, mientras me retiraba y pensaba en la situación, recordé los problemas de aula que hay para el curso de Metodología para el programa de Segunda Especialización en Medicina que coordina muestra querida amiga Teresa Watanabe.  Recordé su pedido de que los docentes que tengan algún aula lo hagan saber para tenerlo en cuenta, por cuanto las aulas que habían tenido disponibles, iban a ser utilizados por sus "titulares" de postgrado.

Una cosa liga otra. Recordé entonces mi estadía en la Universidad de Washington en Seattle y la impresión que me dejó. Supongo que de ahí tengo mentalizado un modelo funcional de universidad que no encuentro en nuestra Facultad, cual es que en una Universidad todo debe estar ordenado y organizado para que los docentes produzcan conocimiento y lo transmitan, es decir que todo aquello que perturbe o distraiga los procesos de creación y desarrollo intelectual (que afecten a los estudiantes también), debe ser minimizado o suprimido.

Lo anterior significa que "emplear el tiempo de un docente para buscar un aula donde dictar su clase", se me hace, por decir lo menos, ocioso. Si a esto agregamos el hecho de que los espacios para impartir clases en la facultad, no sólo son escasos sino también inadecuados, y que inclusive con los prestados, no alcanza.

Reflexiono, sigo percibiendo, termino sin entender y me pregunto ¿cómo se gestiona la Facultad?

No estoy en contra de las iniciativas y menos contra la tecnología, pero al preguntarme por la gestión de Facultad, mi memoria efectúa muchas evocaciones y reflexiones y preguntas; que repasan los 38 años que llevo ligado a mi Alma Mater. Ingresé a estudiar pregrado en 1980, egresé un 1989, mi primer contrato docente lo tuve en noviembre de 1991, en 1995 accedí a una plaza permanente (luego de 4 años como docente contratado), y continúo hasta hoy.

En todo este tiempo, se han dado situaciones que me permiten preguntarme y reflexionar sobre algunos aspectos que comparto con ustedes.
  • Los principales hospitales de Lima nos abrían las puertas y nos albergaban con orgullo. Hoy, somos desplazados por otras universidades de los hospitales públicos, en una confrontación desigual e inequitativa, pues las universidades públicas no pueden competir económicamente con las privadas. ¿Tal vez faltó reacción para plantear la lucha en otros frentes como el legislativo y plantear que la universidad pública debía tener prerrogativas especiales frente a la privada en el ámbito público?
  • En algún momento la Unidad de Postgrado tuvo un local ubicado en Miraflores ¿por qué no fue sostenible?. Tengo entendido que fue porque el local era alquilado ¿resulta está condición determinante? ¿Por qué no tenemos un local de postgrado aparte?
  • Si somos una entidad pública y necesitamos crecer y el estado tiene bienes y durante bastantes años ha tenido recursos para proyectos, ¿por qué no hemos accedido a ellos (los bienes)? ¿por qué algunas obras se han realizado con proyectos de fondos públicos en la ciudad universitaria y en nuestra Facultad no ha sido posible?
  • Como he dicho, no estoy en contra de la tecnología, pero pregunto ¿cuán necesario es tener "aulas de simulación" si no tenemos suficientes aulas para dictar clases regulares?
  • ¿Qué tan necesario es tener un "Hospital virtual" si no tenemos una política o al menos un área de producción multimedia?
  • Ni siquiera podemos crear canales educativos porque pese a tener acceso a todos los recursos que brinda Google a las universidades en forma gratuita. Los funcionarios de nuestra universidad, no nos permiten el acceso a Youtube, que en la actualidad alberga cientos de miles videos educativos y canales del mismo tipo.
  • La Facultad quiere ser tecnológica y en la actualidad eso es más que necesario. Sin embargo, como puede serlo si ni siquiera cuenta con un Wifi aceptable.
  • Quiero finalmente compartir una anécdota que ilustra como finalmente caemos en la habituación y el poder del cambio se topa con un sistema estático e inerte ante la transformación.
    «El año pasado cuando se conformaron comisiones para potenciar al DAMPySP, a requerimiento de nuestra Directora, hice la propuesta de que el departamento produzca material educativo multimedia, para lo cual se necesitaba adquirir una cámara, un trípode y el acceso a Youtube para elaborar material educativo multimedia y crear un canal. La idea inicial era grabar las clases y luego de una edición básica colocarlas en línea. La propuesta fue recepcionada con entusiasmo en nuestro Departamento, elevada a las instancias respectivas, donde nunca fue acogida y menos apoyada. Imagínense si hubiera prosperado».
Considero que ejercemos nuestra labor docente en condiciones "precarias", lo que dice mucho de nuestra entrega e identificación, pero merma la calidad y efectividad de lo que hacemos.

Una mirada crítica no está demás, tampoco opiniones en el mismo sentido. Sin embargo, tal vez continuemos sin cambios, pues no tenemos espacios sostenidos de reflexión, discusión y propuestas engrandecedoras para nuestra querida facultad.

Espero no haberlos importunado... ¡Gracias por leer estas reflexiones!

La tesis ¿sigue siendo una estrategia de formación?

El día de hoy fui consultado por un profesional tecnólogo de radiología para apoyarlo en la culminación de su tesis, la misma que sustentarí...